viernes, 28 de agosto de 2015

Una galería fantástica - Dragones

Así como el león es conocido como El Rey de la Selva, el dragón es la criatura más representativa de la fantasía. Ya sea por su tamaño, por su poder, o por su presencia en culturas muy diferentes, el dragón es el rey de las criaturas fantásticas y su figura corona las historias de este tipo.

Sin embargo, no siempre los dragones tienen el mismo aspecto ni las mismas cualidades. De hecho, los dragones en diferentes culturas tienen hasta temperamentos diferentes. Pero en todas coincide en su poder y el respeto que se le guarda.

Así que, para inaugurar esta sección, he decidido empezar por lo más grande. Hoy os traigo al señor de la fantasía, el Dragón.


Antes de nada, me imagino que os preguntareis ¿nueva sección? ¡Sí! En ella subiré datos curiosos sobre criaturas fantásticas, haciendo un breve resumen de las características principales y de su origen, además de su incidencia en las obras de temática fantástica, y, como siempre, cualquier otra cosa que me resulte interesante añadir. Pero eso no es todo. También acompañaré el texto de muchas fotos, haciendo una especie de galería para que no quepa ninguna duda del aspecto de la criatura, localización u objeto que trate y, además, sirvan como ejemplo de cómo ha sido adaptada la representación en cuestión a lo largo del tiempo.

Y ya no me enrollo más. Vamos con los dragones.


Datos generales

El término deriva del griego, más específicamente de la palabra δράκων (drákōn). Al parecer, el término del que proviene esta palabra es δέρκομαι, que significa “mirar fijamente”. Esto hace referencia a la mirada de los reptiles, fija y atenta, casi hipnótica, que se atribuyó a esta criatura. Al principio este término se usaba para referirse a reptiles reales, pero luego pasó a usarse también para hablar de seres con cualidades fantásticas.


Hay muchas variantes de un dragón, pero la imagen clásica que se nos viene a todos a la cabeza cuando pensamos en uno es la de una criatura alada, de gran tamaño, con escamas y grandes fauces. Este dragón puede volar generalmente y tiene el característico aliento de fuego ¿O no?


Sin embargo, las cualidades que se les atribuyen sí se diferencian. Hay gente que se imagina un simple animal, otros para los que el dragón sea una criatura infinitamente inteligente, otros para los que el dragón represente cualidades negativas, otros para los que, al contrario que los anteriores, el dragón sea una criatura que representa el bien, etc. Y esto, curiosamente, viene relacionado con las culturas y las diferentes concepciones que ha defendido cada una de ellas durante el tiempo.

Veámoslo.


Dragón occidental vs dragón oriental

-El dragón occidental: el malo

¿Qué significa que el dragón de occidente sea el malo? ¿Acaso el de oriente está mejor hecho? ¡No, en absoluto! Lo único que ocurre es que, en occidente, la concepción del dragón es la de un ser malvado, peligroso, avaricioso y carnívoro, capaz de destrozar poblaciones enteras para hacerse con un botín que acumulan en sus cuevas.


Son muchas las leyendas y los cuentos que se conocen sobre los dragones en occidente. Y como podréis ver, incluso dentro de occidente hay pequeñas variaciones en la concepción de estas criaturas. Eso es debido a la gran cantidad de culturas que han convivido en Europa durante tantos años. Cada una desarrolló su versión de la misma leyenda. Aquí van las historias y las concepciones más importantes que existieron en occidente sobre los dragones:

-En la mitología germana, el dragón era considerado un ser del inframundo. Se le llamaba Nidhogg o Nidhug, que significa “el que golpea lleno de odio”. Según la leyenda, se alimenta de las raíces del fresno sagrado hasta que, llegado el Ragnarök (guerra definitiva entre los dioses, los gigantes y los monstruos que conllevará la destrucción del universo) pasará a atormentar a los hombres que queden en el infierno, devorándolos lentamente. Era tan temido el Nidhogg que los vikingos tallaban a la temida sierpe en sus barcos para poder asustar a los espíritus que poblasen las cosas donde iban a atracar (y también a los humanos, dicho sea de paso). No es una historia para contar a unos niños antes de dormir, ¿verdad?


-Para los celtas, el dragón era una divinidad del bosque que sólo los magos podían controlar. Luego pasó a ser utilizado como símbolo de poder y de lucha.


-En la mitología eslava, el dragón era un aspecto que tomaba el dios Veles para enfrentarse al dios Perún. Pero cuidado, Veles era el dios del inframundo y Perún el del trueno. Otra vez está el dragón de parte del malo.

-En lo referente al cristianismo, está la conocidísima leyenda de San Jorge y el Dragón. Según la leyenda, en una ciudad anidó un dragón, con la mala suerte de hacerlo en el suministro de agua. Así, para poder obtener agua, debían ofrecer un sacrificio humano que se elegía por votación. Un día salió elegida la princesa de la zona pero, cuando iba a ser ofrecida, llegó San Jorge en su caballo, se enfrentó al dragón y lo derrotó, terminando así con los sacrificios.


-En el simbolismo medieval representaban la ira, la envida, la traición, el odio, la herejía, el pecado… También es muy conocida la figura del dragón que captura a una princesa y la tiene presa en la torre de un castillo en la literatura caballeresca de la época.

Vamos, que no eran precisamente los mejores amigos del hombre. Pues ahora vamos a ver cómo se diferencian los dragones occidentales de los orientales.


-El dragón oriental: el bueno

Como buen occidental, oriente me supone un misterio. No son tantas las cosas que se saben sobre su cultura (me refiero ordinariamente) y la mitad resultan extrañas y la otra, simplemente incomprensible. Y con los dragones no es una excepción. Las diferencias oriente-occidente vuelven a hacerse notables. Ahora veremos hasta qué punto.

-Para empezar, los dragones no son entendidos como algo negativo. Al contrario, son un símbolo de buena fortuna, ya que proporcionan salud y buena suerte. Además, simbolizan las fuerzas más primitivas del mundo, de la naturaleza y del universo. Representan el poder espiritual supremo, el terrenal y el celestial, el conocimiento y la fuerza. Por todo esto, pasaron incluso a ser símbolo de la familia imperial, ni más ni menos. Algo impensable para la concepción occidental del dragón.



-Y no sólo se diferencian en la concepción ni en sus atributos… sino que también lo hacen en el aspecto. Un dragón oriental tiene cuernos de ciervo, cabeza de caballo, orejas de toro, cuerpo de serpiente, garras de águila y largos bigotes como los gatos. Por si fuese poco, no escupen fuego y no poseen alas. Vuelan gracias a la magia. Curioso, ¿verdad?

-Por último, es tal su importancia en esta cultura que tienen su propio lugar en el calendario chino, que (cómo no) no funciona igual que el occidental. Y simboliza todo lo dicho. De hecho, se cree que es durante el año del dragón cuando nacen más niños.

-Esto me ha parecido de lo más curioso, y es que hay varios tipos de dragones. Hay dragones de agua, de madera, de fuego, de tierra, de metal… y son seres que están siempre vigilando y dispuestos a ayudar.


El dragón y la realidad

Exactamente, el origen de todas estas leyendas se desconoce. Pero sí se cree que ha habido algunos animales que han podido inspirar a los primeros que concibieron la idea del dragón. Los dos principales son:

-Los dinosaurios: No, no estoy diciendo que ya había gente cuando había dinosaurios y que los llamaron dragones. Lo más lógico es que se encontrasen restos de estas criaturas y esto sirviese de inspiración. Al no poder explicar razonadamente el origen de esos restos, se crearon leyendas y mitos para poder cubrir ese hueco.


-Los grandes reptiles: ¿Acaso no habéis escuchado nada sobre el famoso dragón de komodo? Este animal no escupe fuego ni tiene alas, pero su cuerpo sí recuerda a la figura de un dragón de fantasía. Aunque magia… tiene poca.


El dragón y la fantasía

Son muchos los relatos y mucha las historias fantásticas. Los libros de esta temática cada vez son más abundantes en las estanterías de las librerías. Sus historias son diferentes. Sus personajes no coinciden. Sus universos son diferentes. Pero.. sus seres son muy similares. Y, en su mayoría, cuentan con el gran líder, la figura más representativa: el dragón.

Estoy seguro de que todos podemos mencionar al menos un dragón conocido de nuestra infancia.
Yo, por ejemplo, me acuerdo de Saphira, la dragona que acompaña a Eragon en su aventura.

¿Se te ha ocurrido el mismo? ¿Conoces otro dragón conocido? Déjalo en los comentarios si quieres.



Como última reflexión, me gustaría hacer notar una cosa. ¿Te has fijado en que las diferencias entre los dragones son muchas entre las diferentes zonas del planeta… pero a su vez no son tantas? Todos responden al mismo patrón: un ser de gran tamaño, con cuerpo similar al de una serpiente, capaz de volar y cuyo gran poder le hacía ser respetado entre los humanos (ya sea por temor o por veneración). ¿Podría eso significar que en su día existió una criatura parecida que inspiró todas estas leyendas? ¿Hubo un día en el que una criatura así pisó la tierra?

¡Quien sabe! A lo mejor, las leyendas no son tan disparatadas después de todo… ;D


***

Bueno, hasta aquí el tema de hoy. ¿Qué te ha parecido? ¿Crees que los dragones existieron? ¿Te gustaría que esto fuese así?

Como siempre, os invito a dejar vuestras opiniones en los comentarios.

Espero que os hayan gustado las imágenes, me llevó un tiempo escogerlas. Y, por supuesto, también espero que os haya resultado interesante todo lo dicho en este pequeño homenaje a la figura del dragón.

¿Y cómo es un dragón para mí?
Una criatura poderosa e inteligente, dispuesta a ayudar a todo el que lo necesite con sus infinitos conocimientos. Aunque también creo que en un universo fantástico tiene que haber dragones malévolos también. En las historias es necesario que alguien haga de malo, ¿no?

Y, para finalizar, deciros que puede que esta vaya a ser la única entrada que me vaya a dar tiempo a subir esta semana, por eso la he hecho un poquito más larga. Aunque lo mismo os sorprendo este fin de semana. Nunca se sabe.

Pero, por si acaso no puede ser… ¡me despido hasta la semana que viene! ¡Nos vemos! ;D


sábado, 22 de agosto de 2015

Reseña de "La chica del tren"

Hoy me siento otra vez delante del teclado para traeros algo que creía que no iba a hacer hasta pasado un tiempo: una reseña. El caso es que, el otro día, terminé uno de los libros que más me han gustado de los últimos años y me he visto en la necesidad de hacer un pequeño análisis para, al igual que hice con el Lector de Cadáveres, invitaros a su lectura.

No he comenzado a escribir con el objetivo de contaros mi experiencia, pero tengo que decir que comencé a leerlo casi sin saber nada sobre el libro. Al principio estuve a punto de dejarlo. Estuve, de hecho, a punto de leerme el final directamente y pasar con otra lectura (cosa que no había hecho nunca antes). Quería leerme otros libros y el principio de éste no me atrajo mucho. Finalmente decidí continuar cuando vi que no era demasiado largo. Y, a partir de entonces, la historia comenzó a arrancar y terminó enganchándome. Y lo mejor me esperaba al final. No me extraña que haya tenido éxito en las tiendas. Menos mal que no lo destrocé leyéndome el final por separado.

Pero ya dejo de contaros mi vida, ¡pasemos con la acción!


1. Datos generales

El libro lo ha escrito la británica Paula Hawkins.

Aunque de momento no hay demasiado en internet, he leído algún dato curioso sobre ella como que según cuenta en una entrevista realizada al periódico El Mundo, dejó su trabajo como periodista hace seis años para dedicarse a los libros. Uno de sus primeros trabajos fue el encargo de escribir una serie de novelas románticas para mujeres, de las que ha publicado cuatro hasta el momento, siempre bajo un pseudónimo. Y esto es interesante porque no ha sido hasta “La chica del tren” cuando se ha decidido a usar su verdadero nombre al firmarlo.

En este breve artículo también se dice que ella se decidió a escribir esta novela porque no le gustaba del todo la temática sobre la que estaba escribiendo hasta el momento, y se propuso escribir una novela que a ella misma le gustaría leer. Y así nació este libro.

"La chica del tren" salió a la venta el 13 de enero de 2015 y, tras 16 semanas en la lista de libros más vendidos de New York Times, surge la pregunta: ¿será este libro el mayor fenómeno en ventas de los últimos años? Pues eso parece, ya que ha SUPERADO otros grandes éxitos como la famosa serie de HARRY POTTER o las mundialmente famosas CINCUENTA SOMBRAS DE GREY. Está claro que son muchas sus posibilidades de convertirse en el mayor best seller de la historia, según la buena trayectoria que lleva.

¿Qué os parece? ¿Será esto verdad? El tiempo nos lo confirmará. De momento, ¡pasemos al siguiente punto!


2. El meollo del asunto, ¿de qué trata el libro y qué puede aportarnos?

En otras palabras, ¿para qué lectores va dirigido? Y ¿por qué %&$ debería leerlo? Veámoslo paso a paso.

¿Cuál es el argumento de la novela?
El libro narra las vivencias de una chica que viaja todos los días en el tren de las 8.04, con destino a Londres. Desde su asiento ve pasar las casas de una urbanización, pero una de ellas llama su atención sobre todas las demás. Aquella enfrente de la que el tren se para cada mañana, a causa de la luz roja de un viejo semáforo. Desde el tren, la protagonista observará (e idealizará) la vida del joven matrimonio que vive en esta casa. Hasta que un día ve algo que le hará pensar que, tal vez, la vida de esa pareja no fuese tan ideal como ella pensaba. Tan, tan, tan...

¿Qué temas trata?
Muchos, de hecho, lo que parece al principio una narración de simple melancolía y tristeza, se termina convirtiendo en algo mucho más grande y más complejo. El libro es una caja de sorpresas, pero no puedo decir nada sin chafar estas sorpresas. Así que, si queréis saberlo… ¡tendréis que leerlo!

¿Qué personajes aparecen?
No demasiados. Al contrario que pasaba con “El lector de cadáveres”, aquí los personajes son menos (y no tienen nombres tan complejos), aunque tampoco imaginéis tan solo un par. Conoceremos a Jess y a Jason, muy diferentes de Megan y Scott, junto con Anna, Rachel, Cathy, Tom, Damien...

Algo que se nota al leer la novela es que los personajes están muy bien creados. Fundamentalmente las tres protagonistas de esta novela: Rachel, Anna y Megan. En cada capítulo se nos introducen nuevos aspectos de cada uno de ellos, lo que nos ayudará a ir conociéndolos mejor. Y esto es otro de los puntos fuertes del libro: no se nos da nada por supuesto. Iremos descubriendo los vicios, las debilidades y las fortalezas de los personajes con sus propios actos. La autora no nos cuenta nada, lo tenemos que descubrir nosotros por lo que nos muestran los propios personajes.

¿Qué estructura sigue?
Este es otros de los puntos fuertes del libro. Nos deja con la miel en los labios en muchos momentos, fundamentalmente en las escenas próximas al final. Y esto se debe a que la narración se divide en capítulos donde tendremos en cada uno a una de estas tres mujeres como protagonista. Así, la autora nos narra lo sucedido desde puntos de vista muy diferentes, ya que las tres protagonistas tienen muy poco en común. Esto está muy bien por muchos motivos: le da más interés a la obra ya que nos mantiene en vilo muchas veces porque corta la acción cuando más interesante se está poniendo, da más complejidad a la narración porque no vemos la historia siempre a través de los mismos ojos y también porque cada lector se sentirá identificado con tal o cual personaje, llegando a implicarse en la obra sin darse apenas cuenta.

Dicho esto, veamos qué me ha parecido.


3. ¿Qué me ha parecido?

ME HA ENCANTADO. Es muy gratificante lanzarse a la piscina con un libro del que apenas sabes nada y terminar descubriendo una historia fascinante. Es difícil hacer esto, ya que la simple lectura de una sinopsis puede ser muy reveladora. Pero en este caso, la sinopsis es tan escueta que te deja igual que si no la hubieses leído. Y esto, que al principio me fastidió, ahora lo veo como un puntazo ya que me permitió enfrentarme por mí mismo a la historia, sin spoilers.

Veamos quienes se llevan hoy las coronas de los FAVORITOS (OjO, esta sección es SÓLO PARA LOS QUE YA SE HAN LEÍDO EL LIBRO. Para cualquier otra persona puede suponer un spoiler como una casa. Si os encontráis en ese grupo, pasad al siguiente párrafo y seguid leyendo sin miedo, no desvelaré nada. PERO AQUÍ SÍ).

-Personaje favorito: Rachel. Supongo que como casi todo el mundo. No creo que muchos se sientan identificados con Anna o con Megan, por cómo son y cómo son sus vidas. Pero bueno, como dicen por ahí: para gustos, los colores. Rachel para mí supone un ejemplo de superación y de lucha. Estoy seguro de que, aunque en el final no se especifica, terminará llevando una vida plena en la que sea verdaderamente feliz.

-Personaje más odiado: Aquí no tengo ninguna duda. Supongo que al igual que todos los que hayan terminado el libro. Venga, todos juntos: TOM. Cada cosa que se descubría de este personaje era más repulsiva que la anterior. Yo nunca (repito, NUNCA) me hubiese imaginado la verdadera naturaleza de este personaje. No es más que un pobre desgraciado que estaba haciendo muy infeliz a la pobre Rachel, además de ser el asesino que había terminado con la vida de la alocada y caprichosa Megan. Y por si esto fuese poco, había traído a su vida a otra mujer: Anna, a quien también estuvo a punto de destrozar anímicamente (aunque tal vez lo tuviese merecido, XD).

-Escena que más me ha gustado: Aunque el libro en sí me haya gustado mucho, no recuerdo ninguna escena que me gustase especialmente. Sin embargo, sí recuerdo con una sensación de alivio cuando se ve que Rachel finiquita a Tom y que la pesadilla por fin ha terminado.

-Escena que menos me gustó: El principio, tal vez. La vida de Rachel era muy triste y esa sensación de tristeza tan pesada casi me hace abandonar el libro antes de haberlo casi empezado. Hubiese sido un error.

-Parte de la obra que más me ha gustado (inicio, desarrollo o desenlace): El desenlace SIN LUGAR A DUDAS. Desde que descubres el pastel hasta que Rachel va a casa de Tom para hablar con Anna y, de repente, aparece Tom por allí, mirándolas a través de la ventana… qué tensión más bien mantenida hasta el desenlace, ¿no creéis?


4. Juicio final

Lo mejor y lo peor de la novela

Lo mejor de la novela:

-Los personajes: Como ya he dicho, están muy bien logrados. Ver que no se nos muestra todo sobre ellos desde un principio puede ser al comienzo un poco desconcertante, pero luego resulta ser uno de los puntazos del libro.

-El final: Está muy bien pensado. Jamás se me hubiese ocurrido (y eso que a mí se me suele dar bien deducir el final de una película o libro). Es uno de los mejores puntos de la obra. Como ya he dicho, no solo es una buena lectura, sino que tiene un buen final.

-La forma en la que se estructura la novela: No me refiero a la estructura de los capítulos (que también es muy buena), sino a la forma de contar la historia. El desconcierto de la protagonista ante los acontecimientos se nos transmite a la perfección. Nosotros también nos sentiremos confundidos con los acontecimientos y también viviremos los momentos de lucidez de la protagonista cuando encuentra una nueva pista o le es revelada nueva información, que va a haciendo que el misterio vaya teniendo sentido poco a poco.

Lo peor de la novela:

Tan solo hay un pequeño detalle que mencionar en este apartado, por lo menos para mí.

-Demasiada negatividad: Si eres una persona que la lectura de un libro crudo, novela negra, historias tristes, en el que ningún personaje es feliz porque tiene un presente y un pasado trágicos, etc. te echa para atrás… este NO es tu libro. Como ya dije, estuve a punto de dejar de leerlo al principio por esto mismo. Y, aunque ahora mismo sepa que hubiese sido un error, comprendo perfectamente que esto puede desagradar a mucha gente. Pese a todo, esto es un rasgo propio de las novelas de este tipo y supongo que todo el que decide leerse un libro así ya sabe a lo que va. Para que podáis haceros una idea, el trasfondo de la historia se podría representar como un cielo gris que amenaza tormenta.


Pero bueno, tras tanto análisis, ¿qué nota le ponemos? Pues yo creo que se merece un pedazo de...


¡¡9,9!!
¡¡UNA DE LAS MEJORES NOVELAS DE MISTERIO QUE HAN CAÍDO EN MIS MANOS!!
(pero la perfección no existe)


Es una de las mejores novelas de misterio que he leído y, sin lugar a dudas, se merece el éxito que está teniendo. Hacía tiempo que un libro no me enganchaba tantísimo. Me mantuvo en vilo hasta el final, que fue totalmente sorprendente. Inimaginable cuando empiezas con la lectura de la novela, te lo aseguro.

Se la recomiendo a todos aquellos amantes de la novela negra, de las historias de misterio y de las investigaciones policiales. Y, en definitiva, a todo aquel que le haya picado la curiosidad al leer este post.


Por si fuese poco, es un libro muy fácil y rápido de leer. No se hace para nada pesado, lo que lo convierte en una buena opción para un lector ocasional y una apuesta segura para un lector habitual. Personalmente, yo me atrevería incluso a usarlo como regalo (obviamente si a la otra persona le gustan las historias de este tipo, claro) ya que será un acierto casi seguro.

***

Y eso es todo lo que puedo decir de la novela. ¿La habéis leído? ¿Qué os ha parecido? ¿La regalaríais a alguien? ¿Os interesa saber cómo termina la historia? ¿Qué es eso que ve la protagonista que le hace pensar que el matrimonio no era tan idílico como ella pensaba?
Para descubrirlo, tendréis que leerlo.

¡Nos vemos la semana que viene!
Os dejo con buena música: https://www.youtube.com/watch?v=nmFyG0j5e3M
"Got My Mind Set On You", de Damien Leith

 ¡Feliz fin de semana a todos! :D



miércoles, 19 de agosto de 2015

Un cierre especial

¡Hola!
Como os prometí el otro día, hoy os traigo el final que había pensado para la escena de suspense. Tampoco se me ha olvidado que prometí subirlo junto con otra entrada, y aquí la tenéis también (la he subido hace unos minutos). Así, sin más, espero que os guste y... ¡nos vemos muy pronto! :D 

***

El señor Ford tardó en recuperarse pero cuando lo hizo decidió que lo mejor sería comprobar si de verdad alguien había abierto el cajón de su escritorio, antes de llamar a seguridad.

Cuando abrió el cajón encontró un paquete negro que no recordaba haber visto en su vida. Con el corazón a mil, se dispuso a abrirlo. Dentro había una tarjeta de visita donde estaba escrito con una letra clara y precisa un número de teléfono.

El señor Ford cogió el teléfono para llamar a seguridad, pero le temblaron las manos y tuvo que serenarse para poder continuar. Esos temblores habían comenzado a presentarse cuando vivía situaciones extremadamente estresantes, pero hace unos pocos meses se habían vuelto demasiado corrientes y se presentaban casi por cualquier cosa. Había días que los ataques eran tan fuertes que llegaba a pensar que no le quedaba demasiado tiempo de vida. Se frotó las sienes para deshacerse del desagradable pensamiento y respiró profundamente. El corazón le latía tan rápido que estaba a punto de salírsele por la boca. Tuvo que colgar y concentrarse en la respiración para poder recuperarse.

Una vez más tranquilo, se colocó las gafas y la sudada camisa, y se dispuso a llamar. Pero esta vez no a seguridad.

Presionó lentamente cada uno de los dígitos que aparecían en la tarjeta y esperó. Un monótono tono de llamada sonaba de fondo en el auricular, llenando su despacho con su desagradable sonido. Pero Ford lo agradeció porque así silenciaba el palpitar de su corazón que no le dejaba pensar.

Ese hombre era peligroso. No sabía cómo, había conseguido colarse en su despacho y dejarle esa nota sin levantar ninguna sospecha. Tendría que reforzar la seguridad si quería dormir tranquilo. Aunque no creía que fuese a servir de mucho.

Los tonos de llamada se estaban agotando. Parecía que nadie iba a responder al teléfono.
Pero cuando se disponía a colgar, escuchó cómo alguien descolgaba el auricular al otro lado de la línea.

-¿Si?- dijo una voz.

En ese momento, todas las preocupaciones desaparecieron. El miedo, la rabia, el odio, sensaciones con las que se había familiarizado con su día a día en la empresa, emociones que sentía a diario hacia sus competidores, hacia su propia mujer y, muchas veces, incluso hacia sí mismo, desaparecieron por fin. El cansancio de un hombre que ha perdido la esperanza también se diluyó como si nunca hubiese estado allí. Su cielo, un cielo gris, oscuro, lleno de nubes negras, se rasgó por un rayo de luz que le iluminó el camino.

Entonces recordó porqué valió la pena hacer el trato con ese hombre.

Llevaba sin escuchar esa voz quince largos años. Sus años de mafioso habían quedado atrás, pero se habían llevado a la única mujer que amó de verdad. Aún recordaba su amargo llanto cuando la vio morir ante él, sin que pudiese hacer nada para salvarla. Sin embargo, le había dejado una hija. Una hija cuya pista había perdido hace quince largos años y que hoy, por fin, había vuelto a encontrar. La voz se oía cambiada por la edad, pero era ella, su hija, no había duda. 

Y por ella valdría la pena vivir un día más.



El primer fragmento fantástico

¡Buenas tardes!
La entrada que tenía pensada para hoy voy a tener que reservarla para el domingo sin más remedio. Las cosas se han alargado un poquito más de lo esperado, sorry :)
¡Pero que no cunda el pánico! He estado pensando y se me ha ocurrido algo igualmente bueno para hoy. ¿Y qué es eso que se me ha ocurrido? Aquí lo traigo.

Lo cierto es que llevaba tiempo pensando que, aunque la cabecera del blog tenga motivos de fantasía y que en la descripción haya prometido cosas de ese mismo estilo... ¡de momento no había subido nada que tuviese que ver con la fantasía! (Con la medieval, por lo menos).
Así que hoy, a falta de la entrada que iba a subir (y que subiré el fin de semana), os traigo un fragmento de un relato que escribí hace un tiempo. Fantástico, por supuesto.
Al releerlo he encontrado millón y medio de errores, así que lo he retocado casi entero, pero creo que el resultado final ha quedado muy bien.
Así que nada, espero que os guste y... ¡nos vemos el finde!

¡Feliz semana!
***

El castillo del Caballero de la Luna Blanca estaba rodeado de hermosas tierras en las que habían numerosos poblados, fértiles tierras de cultivo y frondosos bosques. En invierno, todos estas tierras permanecían nevadas. Una fina (y a veces no tan fina) capa de nieve, decoraba las hojas de los árboles, las casas de los poblados y los múltiples caminos. Los poblados se animaban por las noches y las posadas estaban hasta arriba de gente que cantaba, bebía y reía con sus compañeros, alrededor de una chimenea de leña.  Es en la posada de uno de estos poblados donde comienza nuestra historia. En una tarde de invierno, allí se encontraba Maese Belman, tomando una cena de pescado y patatas en una mesa próxima a la chimenea, saboreando aquel momento ya que no habituaba a salir de su torre. Mientras degustaba su plato, observaba a la gente de su alrededor y se contagiaba de su alegría escuchando sus historias, sus chistes y sus risas.

Pero, sin que se lo esperase, mientras saboreaba un trozo especialmente jugoso del pescado un hombre encapuchado se acercó a su mesa y, si hacer ningún comentario, depositó sobre ella un voluminoso paquete. Luego, también sin decir palabra, salió por la puerta de la posada dejando a Maese Belman atragantándose con el trozo de pescado, en un intento de preguntarle quién era y qué quería de él. En cuanto consiguió tragarlo, sin ahogarse en el intento, corrió hacia la puerta por la que se había marchado aquel hombre, pero ya hacía rato que había desaparecido, así que no le quedó más remedio que volver a su mesa y preguntarse qué sería lo que contendría aquel paquete. ¿Debería abrirlo allí en medio o esperarse a llegar al castillo? ¿Sería algo peligroso?

Al tiempo se le acercó el camarero, un joven delgaducho y avispado a diferencia de su padre, el tabernero, que más bien parecía un tonel y era más “espeso” a la hora de pensar.

-¿No vas a comer más?- le preguntó.

Maese Belman descubrió que ya había pasado un buen rato sin que hubiese probado bocado, pensando en el dichoso paquete, y el hambre le había desaparecido. De modo que le indicó con un gesto al camarero que se podía llevar el plato. El problema estuvo en que lo hizo con tan mala suerte que golpeó el plato, y éste salió volando por encima de la mesa yendo a parar al suelo donde se rompió en mil pedazos.

El camarero lo miró con enfado y le dijo:
-Me parece que va a tener que pagarlo.

A maese Belman se le cayó el alma a los pies, se había traído lo justo para pagar la comida y no contaba con aquel incidente.

-Eh… bueno- comenzó a decir- La verdad es que yo… bueno, tenía lo justo para pagar la cena.
El camarero levantó la mirada al cielo, suspirando.

-Mira, vamos a hacer una cosa, viejo. Si mi padre se enterase de esto te metería una paliza aquí mismo. Pero yo no soy tan amigo de la violencia, así que vamos a solucionarlo de otra forma, ¿de acuerdo?-

-Sí, sí, por supuesto- dijo Maese Belman rápidamente. No le apetecía que lo cortasen en rodajas y lo sirviesen en un plato esa noche.

-¡Hermano!- gritó el camarero.

Un niño de unos seis años apareció de repente, entre los clientes.


-Trae unos paños y un cubo de agua, de prisa- le dijo, mientras miraba atentamente a Maese Belman, que no entendió lo que quería decirle hasta que llegó el chiquillo y le puso un cubo de agua en una mano y un trapo en la otra.  En un momento, Maese Belman ya no estaba cómodamente sentado, sino encogido en el suelo y limpiando el antes sabroso pescado, ahora sucio y frío, de las tablas del suelo. ¿Por qué no se lo había terminado? Se lamentaba.

Ahora había vuelto a tener apetito.

***



domingo, 16 de agosto de 2015

¿Quién quiere una escena... de suspense?

-Señor, tiene una llamada.

Si la señorita Ross supiese lo que le reventaba escuchar eso, estaba seguro de que no se lo comunicaría cada vez que entraba por la puerta. Pero Michael siempre estaba tan atareado que nunca encontraba el momento para comunicárselo. Y así todos los días, nada más entrar en su despacho, la señorita Ross le comunicaba que tenía llamadas perdidas.

Esas llamadas solían ser un auténtico dolor. Muchas eran de su ex mujer que no pretendía más que sacarle todo el dinero que pudiese. Y otras muchas eran de agencias que intentaban hacer contratos y otras tantas sandeces a las que no prestaba atención alguna, porque sus intenciones no eran muy diferentes a las de su ex mujer. Si fuese por él, quitaría el contestador y se olvidaría de aquellas llamadas que él nunca pudo responder por no haber estado allí. Pero nunca encontraba el momento. Por las mañanas era muy temprano y por las tardes estaba demasiado cansado. Y su secretaria no hacía más que recordárselo. Lo peor era que, una vez sabiendo las llamadas perdidas que tenía, le carcomía la sensación de que debía, como mínimo, escuchar los mensajes dejados en el contestador. Lo que significaba enfrentarse a unos quince minutos de sandeces publicitarias, entre las que se intercalaban los insultos varios y las cada vez más estrambóticas acusaciones de su recién divorciada mujer. Algún día iba a explotar, pero hasta ese día, sólo le quedaba aguantar.

-Gracias, Ross- gruño antes de entrar en su despacho.

Iba a que tener una charla con esa mujer. Pero hoy estaba demasiado cansado.

Colgó el abrigo en una percha nada más entrar y, con paso cansado, recorrió el amplio despacho hasta poder derrumbarse en su sillón, frente al escritorio. Cansado, se quitó las gafas y se masajeó los ojos, reuniendo fuerzas suficientes para hacer lo mismo que cada tarde.

Pulsó el botón rojo del contestador.

Después de tantas veces, ya le resultaba fácil predecir de quién iba a ser el mensaje. Lo cierto es que su mujer estaba muy pesada con el tema de quién se quedaba el coche. “El coche”. Él tenía cinco, pero la muy bruja se estaba intentando apoderar del de su padre. Una auténtica obra de arte, pieza de museo de valor incalculable. Un coche que no habían usado en todos los malditos años que se alargó su matrimonio. Y se lo quería robar. A él.

Estaba seguro de que la voz que se disponía a oír era la de su ex mujer.
Por eso su sorpresa fue mayúscula cuando no lo fue.

-Buenas tardes, señor Ford.

Interrumpió su masaje ocular de manera inmediata y se colocó las gafas a toda velocidad. La voz había hecho un pequeño descanso, como si hubiese sido consciente del sobresalto que le iba  suponer escuchar la grabación.

Llevaba años sin escuchar aquella voz. De hecho, ya ni la recordaba bien. Pero estaba seguro, era él.

-Creo que se acordará de mí. He sido fiel a mi palabra, señor Ford. Usted me pidió ayuda hace tiempo. Y hoy por fin he conseguido lo que me pidió. Teniendo en cuanta todos los años que me ha llevado hacerle este pequeño favor, tiene usted una deuda muy grande conmigo.

Escenas de oscuros callejones y sucios trapicheos vinieron a su mente, como si se tratasen de viejos fantasmas del pasado. Notó cómo el sudor le resbalaba por la frente, en forma de pequeñas gotas. Pero no iba a dejar que el pánico le dominase. De un fuerte golpe en su escritorio el miedo y los recuerdos volvieron a su lugar, en el fondo de su mente, esperando otro momento para salir.

-Pero eso…

La voz hizo una pausa larga.

-…ya lo hablaremos a su debido tiempo. Mire en el segundo cajón de su escritorio. Allí le he dejado lo que tanto buscaba.

Asustado, Michael echó un vistazo al escritorio, para descubrir con horror que el segundo cajón estaba un poco abierto. ¿Cómo había entrado aquel hombre allí? La seguridad de su edificio era la mejor. Nadie podía salir y mucho menos entrar sin que su servicio de seguridad lo supiese.

-No se crea invulnerable, señor Ford- le dijo la voz del contestador, como si adivinase sus pensamientos- Y recuerde que yo nunca me olvido de una deuda.

Luego, sonó el pitido que indicaba que la grabación había finalizado.

***

¡Bienvenidos a una nueva sección del blog!

Se llamará "¿Quién quiere una escena...?". En ella subiré relatos muy cortos, ya que básicamente consistirán de una única escena (aunque puede consistir de más), en las que intentaré plasmar sensaciones o sentimientos (miedo, odio, asco, felicidad, tristeza, alegría...), o bien tendré que situarla en un lugar concreto, o bien tendré que tratar algún tema, o tendré que hacer que aparezcan algunos personajes en concreto, etc. En definitiva, cualquier cosa que se me ocurra hacer en una única escena. Porque esas son las cosas que apunto en mi cuaderno de escritor.

Por cierto, al ser ésta la primera, no me pude resistir a poner un cierre. ¿Un cierre? Sí, un pequeño "final" a esta escena. No lo he querido subir como parte de la sección porque quita un poco de gracia al tema, pero la subiré junto con la siguiente entrada. No os quedareis sin saber el final, lo prometo.

Y con eso, todo queda dicho. ¡Nos vemos la semana que viene con más entradas!

¡Que tengáis todos una buena semana! :D


viernes, 14 de agosto de 2015

Reseña de "El lector de Cadáveres"

¡Buenos días!
Hoy os traigo una reseña del último libro que he leído. Terminé de leerlo hace unos días y, después de leer tantas otras reseñas por internet, me dije ¿por qué no hacer yo mi propia reseña? Como creo que su lectura merece la pena, finalmente hoy me he decidido a traerlo aquí. Así que dejo aquí la introducción para no chafarme nada del análisis y… ¡vamos a por ello!

1.       Datos generales

El libro está escrito por Antonio Garrido, un escritor español nacido en Linares. Su obra no es muy extensa, pero sí de calidad. Ha escrito La Escriba, El Lector de Cadáveres y El Último Paraíso (su última obra, de momento). Así que, si os gusta lo ve veis aquí, también os invito a leer los otros libros porque, por lo que he podido ver, también tienen muy buena pinta.

Según él mismo pone en la parte final de la novela, en forma de nota para el lector, la idea de escribir este libro surgió tras darle muchas vueltas a la necesidad de escribir una nueva obra. Quería escribir, pero no terminaba de encontrar el tema que tratar. La idea se resistió al principio, pero terminó llegando a raíz de una invitación a un congreso sobre medicina forense y toxicología, en Nueva Delhi. Al final no pudo asistir, pero un conocido suyo pudo enviarle un dossier en el que se trataban todos los puntos que se habían tocado en la charla. Y allí se encontró con un artículo en el que se trataban los inicios de la medicina forense. A partir de ahí, comenzó a documentarse para finalmente disponerse a escribir la novela. La historia termina cuando el libro salió a la venta en 2011 (por lo que tampoco os imaginéis una antigualla aburrida).

Bueno, aquí termina la parte introductoria… ¡pasemos a la que es realmente divertida! ¿De qué va el libro?

2.       El meollo del asunto

El libro trata muchísimos temas. Para empezar, narra la historia (de forma ficticia, aunque basada en hechos reales) del que es considerado, el primer forense de la historia. Además, trata el día a día de la antigua China, incluyendo sus costumbres, sus rituales, la sociedad y su estructura, el orden público, las diferentes formas de poder, la figura del emperador presidiendo todas ellas…
La sensación al leerlo es la de sumergirse literalmente en esa época, pasear por sus calles y ver de primera mano cómo era el vivir en una de esas ciudades.

No quiero chafar a nadie la historia. De hecho, yo me leí el libro “saltando a la piscina”, es decir, tan solo habiéndome leído muy por encima una pequeña sinopsis. Cuando comencé a leer no tenía ni idea de lo que me iba a encontrar. Al principio la forma de escribir no me gustó, pero pronto olvidé esas menudencias cuando, al terminar el primer capítulo, me encontré con el primer gancho que presenta la historia. A partir de ahí es imposible parar de leer, en serio. Por eso digo que, si te ha gustado lo que has leído hasta ahora en la reseña, lo dejes en este punto y te leas la novela. Luego, una vez terminada, regresa aquí, donde lo dejaste, para terminar de leer el post y ver cómo presento yo la novela y qué me ha parecido. Si no tienes claro si leerla o no todavía, no te preocupes, no voy a chafarte nada de la historia. Pero sí es verdad que ya tendrás más conocimiento de la novela y no es lo mismo que enfrentarse a ella tú solo. ;D

Una vez dicho eso, vamos con la sinopsis del libro. La obra narra la vida de Song Cí. Gracias al trabajo de su padre, Cí conoce al Juez Feng. Feng es un anciano respetable y atento que cuidará del pequeño Cí como si se tratase del hijo que nunca tuvo. Se encargó de que ingresase en la academia de la ciudad, donde se dedicó plenamente al estudio para poder llegar a ser él también juez algún día. Conocedor de la precaria situación económica de su familia, Cí se empeño en estudiar con todas sus fuerzas para poder convertirse en una persona de provecho y así agradecer el trabajo y dedicación de su padre al pagarle la academia y, por supuesto, la ayuda del Juez Feng.

Sin embargo, su padre debe regresar a su pueblo natal por la muerte del abuelo de Cí, ya que la tradición dictaba que se debía guardar luto (y el luto incluía abandonar la actividad laboral). De este modo, Cí se ve obligado a convivir otra vez con su odiado hermano y a abandonar los estudios. Pero la situación va a peor cuando, pasado el luto, su padre no quiere regresar a la ciudad.

La vida en el campo empieza a ahogarlo y no soporta ya la convivencia con un padre que no quiere que regrese a la ciudad para reanudar sus estudios ni con un hermano que no hace más que meterse con él por la envidia que le guarda.

Pero la situación volverá a dar un giro de 360º cuando se produce un asesinato en el pueblo. Desde entonces, Cí se verá obligado a dejar de ser un niño y transformarse en adulto. Deberá usar hasta la última gota de su astucia para sobrevivir al terremoto que sacudirá su vida y terminará descubriendo que no todo el mundo resulta ser lo que parece…

Y ya no digo más, que si sigo hago spoiler.

En lo que respecta a los personajes, tenemos un despliegue magnífico. Hay infinidad de ellos en la historia. Desde un simple posadero hasta el mismo Cí, se puede ver que se ha cuidado mucho el uso de expresiones, las costumbres, la forma de actuar, etc. Simplemente espectacular. De hecho, los propios cadáveres que aparecen en la obra son también casi personajes, ya que es gracias a lo que ellos cuentan a Cí sobre su asesinato por lo que él consigue resolver el caso. De hecho, la frase que representa a libro es “Los muertos siempre delatan a sus asesinos”.

No me gusta usar terminología, pero no se me ocurre una palabra mejor para definir a estos personajes que “redondos”. Un personaje redondo es aquel que presenta una evolución dentro de la obra, vemos cómo crece, cómo se equivoca y cómo aprende de sus errores. Es lo contrario de un personaje plano, donde el bueno es el bueno y el malo es el malo (una película de superhéroes, por ejemplo, está llena de personajes planos, sin profundidad alguna). Pues eso, que los personajes de este libro presentan una evolución clara y sorprendente a lo largo de la novela. Lo bonito de esto es que terminamos empatizando con Cí hasta el punto compartir sus sentimientos en muchos momentos de la historia.

Y después de haberos introducido en la novela, vamos a ver lo que me ha parecido a mí la obra.

3.       ¿Qué me ha parecido?

Pues, sinceramente, me ha ENCANTADO. Desde El Médico de Noah Gordon no había leído un libro que me gustase tanto. La lectura me resultó incluso amena, aunque el tamaño pudiese echar un poco para atrás, porque la tensión que mantiene la obra es tal que es muy difícil interrumpir la lectura. Los personajes están muy conseguidos, especialmente el protagonista, con el que podemos empatizar muchísimo.
En lo que respecta a documentación, no soy un experto en la antigua China, pero como lector sí puedo decir que está muy conseguida. Las calles, los ambientes, la gente… todo está genialmente recreado y la lectura acerca un poco más a esta cultura que a muchos nos resulta poco conocida.
El argumento, por otro lado, es buenísimo. Las situaciones están muy bien enlazadas unas con otras y no se pierde el ritmo en ningún momento. Además, el final es SORPRENDENTE. Soy una persona que suele predecir el final de una peli antes de que ocurra, pero en este caso, puede que por que el ritmo de la lectura era trepidante y no me dio tiempo a pensar, el final me pilló desprevenido. No puedo decir nada porque no quiero spoilear a nadie, pero lo que sí puedo hacer es aseguraros que os va a sorprender como mínimo. Ya lo veréis.

Ahora vamos con los favoritismos (SPOILER ALERT, sólo recomendado para los que os habéis leído la novela. Quedáis avisados):
-Personaje favorito: Obviamente Cí, el protagonista, por todo lo que he dicho ya (muy bien representado, presenta una evolución, se equivoca y aprende de sus errores, la narración ayuda a sentirse identificado con él, etc. En definitiva, es un personaje creíble al cien por cien).
-Personaje más odiado: El anciano que ayuda a Cí cuando éste más lo necesita, para luego traicionarlo vilmente. Es una sabandija retorcida que intenta manipular a Cí para sus propios fines. Afortunadamente tiene un final merecido.
-Escena favorita: La lucha entre Cí y el gigante en la taberna. La astucia de Cí vence a la fuerza bruta, otra vez más. Espectacular. Viví el momento con el corazón a cien ya que no se sabe quién puede ganar hasta el último momento.
-Escena que menos me gustó: En la que el juez Feng casi consigue que se le corte la lengua a Cí para evitar que testifique en el juicio. La angustia que transmite esa escena no debe ser sana, en serio. Lo cierto es que comparte podio con la escena en la que Astucia Gris consigue sonsacar a Cí el resultado de sus investigaciones con una sucia artimaña. En la obra sobran personajes retorcidos.
-Parte de la obra favorita (inicio, desarrollo o desenlace): Me ha gustado la obra en su totalidad, pero la mejor parte es el desenlace. El juicio en sí es ESPECTACULAR. Me encantó cómo se defendió Cí hasta el final y también el hecho de que apareciesen todos los personajes importantes, reunidos. La batalla final entre Feng y Cí fue legendaria.

4.       Veredicto final

Ahora, habiendo visto todo lo que se puede ver de la obra sin spoilear a nadie, voy a emitir el veredicto. 
Empezamos con lo mejor y lo peor del libro.

-Lo mejor: Lo dicho. Genial puesta en escena, el argumento es muy bueno, la estructura de los capítulos está genial para enganchar al lector y ayuda a mantener constante el ritmo de la obra. Los personajes están muy bien caracterizados, lo que ayuda a meterse en la historia, etc.

-Lo peor (o no): Hay tres elementos a resaltar aquí:

-Contenido explícito: En la obra hay escenas en las que parece que el autor se ha recreado en la violencia. Describe con demasiado detalle las escenas de violencia, se ensaña con las torturas, describe la sangre y demás fluidos que se derraman o que supuran las heridas, además de centrar estas escenas en la descripción del sufrimiento de los personajes que las sufren. Además, también hay alguna escena de sexo, pero tampoco os imaginéis las cincuenta sombras de Grey en versión oriental porque solo hay un par y tampoco tienen un gran peso en la novela.
Tampoco quiero que nadie piense que la novela es algo del otro mundo. Las escenas de violencia, aunque están descritas con detenimiento, tampoco es que sean nada por lo que haya que llevarse las manos a la cabeza. Creo que era importante destacarlo en el análisis, pero tampoco es algo que siente mal a la novela. Al contrario, refleja la violenta sociedad del momento y describe de primera mano los maltratos que recibían aquellos que no tenían con qué defenderse y vivían a merced de los poderosos.

-Sherlock Holmes en el lejano oriente: Esto podría ser un punto bueno a su vez. En la novela se nos presentan una serie de asesinatos que el protagonista, por una o por otra razón, deberá resolver. Como en todos los libros de este estilo, hay deducciones que parecen muy forzadas. Luego, como siempre, se ve que tiene lógica y todo, pero es muy llamativo cómo se puede saber tantas cosas de un simple rasguño. Pero esto tampoco tiene por qué se algo malo. Las deducciones en la obra, y lo dice una persona que está muy acostumbrado a leer novelas de detectives, están MUY LOGRADAS. No queda duda alguna de lo que el protagonista ha visto al examinar el cuerpo o la escena del crimen y luego las deducciones y razonamientos son lógicos y rápidos. No se aburre al lector con párrafos innecesarios sólo para convencerle de lo listo que es Cí, sino que el escritor va al grano y nos plasma con éxito una reconstrucción del crimen que no deja lagunas. Y eso también lo podemos llevar al argumento, ya que en sí el libro es una gran investigación. El desarrollo está genial. Partimos de un principio y llegamos a un final. Y lo que al principio parece estar envuelto en sombras, luego se vuelve transparente como el agua. Se entiende a la perfección el razonamiento global, los motivos del asesino, los motivos de Cí, las circunstancias y el pasado de los personajes… no hay lugar a ninguna duda, como otras veces ocurre en libros y películas de este estilo, donde no se consigue hacer llegar al espectador/lector el razonamiento final.

-Los chinos tienen nombres muy parecidos: O eso parece en esta obra, donde vemos a personajes como Song, Tang, Ming, Peng, Feng, Fang, Kang, Bo, Dong, Kung, Fong, Kong…
Yo mismo, que me terminé el libro hace un par de días, no reconozco la mitad de ellos. Y es que es MUY DIFÍCIL memorizar tanto nombre raro y tan similar entre sí. Me acuerdo simplemente de los más importantes y ya está. Para los que os cueste asimilar tanto nombre y retenerlo, este libro os va a suponer un pequeño reto. Sin embargo, no todo está perdido, porque el propio autor es consciente e intenta hacerlo más ameno poniendo sobrenombres como “el mendigo”, “el anciano” o “el consejero” y sólo menciona los nombres cuando es estrictamente necesario, lo que hace más sencillo saber a qué personaje se refiere el autor.

Visto lo mejor y lo peor, vamos con la puntuación:


¡9/10 estrellas!
ESPECTACULAR, MAGNÍFICO TRABAJO Y MAGNÍFICO RESULTADO


En conclusión, una lectura ALTAMENTE RECOMENDADA. Es un libro largo, pero vale la pena dedicarle el tiempo que se merece. Propone una lectura muy entretenida, con un buen gancho que hace que quien la empiece, la acabe. Especialmente recomendada a aquellos que les encantan las historias de misterio, de detectives y de casos aparentemente imposibles de resolver. También para aquellos amantes de las culturas extranjeras y exóticas, tendrán ante ellos un despliegue fantástico de la sociedad y las costumbres de la época. Y, en general, para todo aquel que le haya gustado este post, porque estoy seguro de que no se arrepentirán de darle una oportunidad a la obra.

***

Y hasta aquí llega el post de hoy. Espero que os haya gustado. Si alguien se lee la obra a partir de este post o si se la ha leído ya, por favor, comentad lo que os ha parecido. Y para aquellos que crean que me he saltado algo en el análisis, comentadlo también sin miedo. No es el último que pretendo hacer, así que prestaré atención a lo que os gustaría que reflejase en los análisis para las siguientes ocasiones.

Por cierto, esta semana publicaré otro post más. Así que… ¡permaneced atentos!
Os deseo un buen fin de semana a todos. ¡Nos vemos pronto!